Maximiliano Acuña perdió ambos miembros inferiores cuando un automóvil lo aplasto contra su camión de trabajo a 130 kilómetros por hora mientras se encontraba trabajando como recolector de residuos en la capital federal la madrugada del 22 de marzo de 2017.
Luego de este suceso, y debido al largo proceso de adaptación a sus nuevos miembros protesicos, ya no pudo volver a trabajar en la calle, por lo que el sindicato lo incorporo para realizar tareas en la secretaria de discapacidad en la sede del mismo.
Su historia tuvo una amplia difusión, y por ello la legislatura de la ciudad de Buenos Aires, estableció el día de su accidente como el Día del Recolector de Residuos, en Junio de 2017, concurriendo al acto junto a su padre Alberto, quien lo acompaña en todas sus actividades diarias.
(Trabajo en proceso)


